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A Vera la recogimos cuando acababa de ser atropellada, la convivencia en su casa de acogida fue complicada al principio, tenía mucho miedo, no acababa de adaptarse a su compi perruna y con la comida mostraba un comportamiento un tanto agresivo.

Cuando veas el vídeo pensarás que todo esto es mentira, ahora le encanta jugar con otros perros, no tiene miedo a nada, con la comida ningún problema...¡por fin es una perra feliz!

Por cierto, es ultra hiper mega cariñosa.

¡VERA BUSCA FAMILIA! Es de tamaño peque, sólo pesa 7 kg.

Nos dieron el aviso de Ona en un campo de Alzira, estaba embarazada y el estado de gestación era muy avanzado por lo que no la pudimos esterilizar. Pudo tener a sus bebés en una casa, lejos de ser algo bonito sufrió mucho y la primera perrita que nació estuvo a punto de morir, le costó poder empezar a respirar.

Esterilizar es la solución al abandono.

¡ONA ESTÁ EN ADOPCIÓN!